AGG" es la abreviatura de "Ley General de Igualdad de Trato". Como su nombre indica, su objetivo es proteger a las personas de la discriminación en los más diversos ámbitos de la vida. Sin embargo, aunque la AGG proporciona una buena base, siempre hay personas que infringen las disposiciones pertinentes.
¿En qué consiste exactamente la AGG?
La AGG es una ley concebida para proteger a las personas de la discriminación por su identidad sexual o de género, tanto en la vida cotidiana como en el trabajo. Sin embargo, también abarca otros ámbitos, como
- Etnias
- Género
- Religiones
- Visiones del mundo
- Deterioros
- Edad
- Transgénero
- Intersexualidad.
Las personas que no se ajustan a la "norma social" o a la media de aquí no deben ser marginadas ni discriminadas ni en la vida cotidiana ni en el trabajo.
La AGG en la vida cotidiana y en el trabajo
Un examen más detallado de cada uno de los ámbitos de la vida cotidiana y profesional demuestra lo completa que es la AGG. Por ejemplo, se aplica lo siguiente:
- Los empresarios no pueden preguntar sobre la orientación sexual de los solicitantes durante una entrevista de personal.
- Las personas que no se ajustan a la "norma social" o a la media no deben ser discriminadas en relación con las oportunidades de formación continua, ascensos y similares. Al mismo tiempo, no deben ser despedidas por su orientación/identificación sexual.
- La AGG también protege a las personas queer de los insultos de sus colegas, entre otras cosas.
- La protección también se aplica a la "vida cotidiana normal", por ejemplo al ir de compras, en el transporte público o de fiesta en una discoteca. No se debe negar la entrada a los homosexuales por su orientación o identificación sexual.
Estos son sólo algunos de los muchos ejemplos en los que se aplica la AGG. El texto legal se ha redactado de forma que abarque el mayor número posible de ámbitos y ofrezca la mejor protección posible a las personas afectadas.
AGG: ¿qué significa realmente discriminación?
Desde el punto de vista jurídico Se distingue entre actos directos e indirectos. Un acto directo se produce cuando una persona recibe un trato menos favorable que otras debido a su orientación o identidad sexual.
Demostrar la discriminación indirecta puede ser un poco más complicado en este caso. Un ejemplo clásico: dos mujeres quieren asistir juntas a un evento. El portero asume que son lesbianas y les niega la entrada.
Por cierto, aunque las dos mujeres no fueran lesbianas, podrían acudir a la AGG, ya que se tomó una decisión contra ellas basándose en la suposición de que eran maricas. Se trata de la discriminación en sí y no de si las personas afectadas pertenecen realmente a la comunidad.
¿Cómo puede beneficiarse de la AGG?
Desgraciadamente, las disposiciones de la AGG se infringen repetidamente en la vida cotidiana y profesional. Los afectados tienen la opción de reclamar daños y perjuicios o una indemnización. Esta reclamación debe atenderse en el plazo de dos meses, siempre que esté justificada. Si la otra parte se niega, puede ser necesario acudir a los tribunales.
Sin embargo, no tiene por qué llegar a eso. Tal vez sea posible resolver la disputa y la causa del problema en una conversación personal.
Quien sufra discriminación y busque apoyo ha encontrado en la Agencia Federal contra la Discriminación a la persona de contacto adecuada. Si ambas partes están dispuestas a encontrar una solución amistosa, esta suele ser la opción menos complicada.
El asesoramiento en la Agencia Federal contra la Discriminación es, por supuesto, discreto y gratuito. A menudo puede ayudar a los afectados a hacer valer sus derechos... y, en última instancia, también a hacer una importante contribución a la comunidad.
Muy bueno, ni siquiera sabía que existía. ¡Más!
Yo sufrí discriminación muy a menudo después de salir del armario. Pero por suerte también hay mucha gente que te acepta y te da valor para ser quien eres.