"Hace tiempo que no tengo ganas de sexo... ¡Sin duda soy A Sexual!". - Seguro que hay gente a la que ya se le ha pasado esta frase por la cabeza. En primer lugar: es absolutamente normal que de vez en cuando haya un parón en la cama porque el ánimo no acompañe. Sólo a unos pocos les apetece siempre.
Sin embargo, las personas Sexuales se caracterizan porque en la mayoría de los casos su interés por el sexo, la ternura y similares es casi nulo. No se obligan a llevar una vida célibe, no sienten ningún deseo de acostarse con su pareja (o con cualquier otra persona), por ejemplo. Y es precisamente por eso por lo que a menudo se les malinterpreta.
Especialmente en una relación con una persona A sexual puede no sentirse deseada por la pareja respectiva. Por tanto, es especialmente importante centrarse en un factor importante: Comunicación. Ninguna persona debe acostarse con otra por obligación o expectativa.
¿Qué tipos de A sexual existen?
La sexualidad puede manifestarse de diferentes maneras. Algunas personas tienen una falta general de deseo sexual, de ternura y de masturbación. Sin embargo, para algunas personas, la Sexualidad A no significa, por ejemplo, no querer tener orgasmos.
A muchos les encanta satisfacerse a sí mismos, pero no les apetece mantener relaciones sexuales con una segunda persona.
Por lo tanto, simplemente no es posible hablar de una "sexualidad A típica". Este tipo de orientación también puede expresarse de distintas maneras. Sin embargo, la mayoría de las personas de este grupo tienen algo en común: no pueden entender en absoluto por qué gran parte del mundo actual tiene que girar en torno al sexo.
¿Cuándo te das cuenta de que eres A sexual?
A más tardar cuando el deseo sexual no aparece durante un largo periodo de tiempo, muchas personas se preguntan si el "problema" podría residir en una sexualidad A existente. Una conversación con el médico de familia puede ayudar en este sentido. El primer paso es comprobar si existe una causa física para la falta de deseo.
El estrés también puede ser la causa de que otras cosas se perciban actualmente como más importantes. La psique desempeña un papel importante en cuestiones como la lujuria y la pasión.
Una vez descartadas las causas físicas y psicológicas, la sospecha de que la persona A pueda ser sexual suele poder acotarse un poco mejor.
Ser sexual no es estar "enfermo".
Sorprendentemente, muchas personas utilizan el término "A sexual" como una palabrota. A veces incluso cuando han sido rechazados por otra persona y no puede haber "¡ningún otro motivo para el rechazo!
Pero: A Ser sexual no significa estar enfermo, por supuesto. R Las personas con orientación sexual representan una parte importante (y no pequeña) de la comunidad LGBTQIA+. Al igual que otros homosexuales, saben lo difícil que es salir del armario y enfrentarse a prejuicios de diversa índole.
En resumen: A ¡Ser sexual no es una enfermedad! PERO: Existen algunas causas físicas y psicológicas que pueden reducir el deseo sexual. Por lo tanto, el primer paso es llegar al fondo de la razón de la falta de deseo. Si resulta que todo está bien física y psicológicamente, es el momento de intentar comprenderte cada vez mejor. Curiosamente, para muchas personas es incluso una especie de alivio haber encontrado "por fin" una palabra para lo que tanto les conmueve.
¡Gran contribución!
Asexual no tiene nada que ver con no desear sexo o mimos.